Una de mis obsesiones cuando entré en política es la de evitar prometerle a la gente cosas que no pueda cumplir. Y eso, justamente, hace que en Ciudadanos atendamos muchas peticiones que pueden parecer pequeñas pero que son fundamentales para la calidad de vida de los malagueños. Una de ellas era la de las numerosas quejas suscitadas por el funcionamiento de las rampas para personas con discapacidad de los autobuses de la EMT. Y me enorgullece ver que eso ha cambiado gracias a un acuerdo presupuestario de 2017 de Ciudadanos con el equipo de gobierno.
Así, se aprobó una partida de 90.000 euros para establecer un protocolo y mejorar la prestación de este servicio reforzando los talleres. Ayer mismo, tuvimos respuesta oficial del gerente de la empresa de transportes, Miguel Ruiz, a las preguntas que habíamos hecho para evaluar los resultados. Y el número de quejas ha desaparecido, frente a las 24 que había hace dos años. Son, según la citada respuesta, los mejores datos del país, algo que me llena de satisfacción.
Se cumple así con una reivindicación de la Agrupación de Desarrollo Málaga Accesible, cuyos diagnósticos escuchamos siempre con mucha atención y forman parte de nuestra acción política municipal. En este sentido, pensamos que Málaga fue hace años una ciudad puntera en accesibilidad y en políticas para personas con algún tipo de discapacidad. Pero la realidad tristemente es que nos estamos quedando atrás.
Consideramos que la ordenanza de Accesibilidad se ha quedado obsoleta, pero no es la única carencia. Hace algunas semanas, por ejemplo, llevamos una iniciativa a pleno para reclamar un protocolo para grandes eventos para que las personas con discapacidad puedan disfrutar en igualdad de condiciones de la Semana Santa, de la Feria, de grandes actos, mercadillos… Meses antes, también denunciamos que más de 900 negocios del Centro Histórico incumplen la mencionada ordenanza.
Todos en cualquier momento podemos tener algún grado de discapacidad. Y hay que apostar y tomarse en serio la igualdad de oportunidades de estas personas. Málaga debe ser una ciudad inclusiva y amable.
Artículo publicado por Juan Cassá en Viva Málaga, el martes 6 de marzo de 2018