Han sido las clases medias y trabajadoras, los pensionistas, y los jóvenes quienes han pagado el pato de una crisis durísima que no provocaron. Han sido los jóvenes los castigados con contratos muchas veces indignos y con una pérdida del 25% del poder adquisitivo por culpa de una de las peores regulaciones laborales de Europa. Ciudadanos lucharemos por sacar adelante nuestra propuesta de legislación para recuperar derechos para los trabajadores, ganar en empleo de calidad, e ir abonando el terreno para las pensiones futuras.

En estos días, mi presidente, y espero que pronto el de todos los españoles, Albert Rivera, y otros dirigentes nacionales han ido desgranando algunas de las líneas que marcan el posible desbloqueo de los Presupuestos Generales. Gran noticia para el país y en especial para aquellos cuyas rentas son inferiores a los 18.000 euros anuales, muchos ‘mileuristas’. La reforma implicará un ahorro anual de entre 740 y 400 euros por trabajador por debajo de este umbral. También habrá un impuesto negativo de 1.200 euros anuales para quienes tienen a cargo un cónyuge con discapacidad.

La natalidad y las familias numerosas se ponen también en el centro político. Urge promover cambios demográficos. Por eso, se va a implantar una ayuda de 1.000 euros anuales para familias con hijos de 0 a 3 años para escolarizarlos y sube la deducción de 1.200 euros para familias numerosas en 600 euros más por cada hijo a partir del tercero (segundo, en casos especiales).

Para los jóvenes, hemos apostado por un complemento salarial, ligado a la formación, para los que tienen peores ingresos (estimamos unos 18.000 posibles beneficiarios en la provincia de Málaga). Con fondos europeos.

Hay 113.000 pensionistas malagueños por debajo del umbral de la pobreza. Se subirán por encima del IPC de las pensiones mínimas; habrá ascensos más palpables para quienes están algo mejor, y bajan los impuestos para los pensionistas ‘mileuristas’. Es de justicia. Como también lo es la equiparación salarial de nuestros policías y guardias civiles con los cuerpos autonómicos (sólo en nuestra provincia hay 5.000 agentes a la espera). Este año se presupuestan los primeros 500 millones para terminar de lograrlo en 2020.

Es la hora de seguir devolviendo el esfuerzo a la gente. En Málaga capital ya llevamos 22 millones de ahorro fiscal gracias a nuestros acuerdos. Y en Andalucía, se ha eliminado de facto el impuesto de Sucesiones. Y seguiremos, sin duda.

Artículo publicado por Juan Cassá en Viva Málaga, el martes 3 de abril de 2018