En los últimos tiempos, se ha instalado una corriente de opinión pública que creo minoritaria pero es muy ruidosa. Consiste en demonizar al turismo, a los empresarios hosteleros… Consiste en hablar mal de Málaga. Consiste, incluso, en jactarse en medios y programas de ámbito nacional, de dibujar una situación irreal en la que Málaga sería una ciudad de desmadres, gamberradas, comportamientos incívicos, turismo de borrachera… Consiste en el burdo juego de palabras de intentar relacionar Málaga con Magaluf. ¡Basta! Claro que hay muchas cosas que mejorar y por las que trabajar, pero dejen de hacer demagogia a costa de la ciudad en la que (por fortuna) vivimos.

Ahora se acerca la Feria, que más allá de un evento de ocio es un potente revulsivo económico para muchas economías aún maltrechas. Y volverán a lanzar mensajes de inseguridad, de machismo, de no sé qué puntos negros de violación… ¡Basta!

Claro que es importante controlar que las terrazas cumplan. Para eso está la labor inspectora y las ordenanzas. Claro que hay que hacer que los pisos turísticos sean legales, no sean competencia desleal, no defrauden a Hacienda, cumplan con los parámetros laborales y de consumo… Para eso también está la normativa. Ahora la hemos emprendido con las despedidas de soltero, que hay tantas y tantas variadas como variadas somos las personas. Ya se ocuparán los hosteleros en intentar no potenciar perfiles indeseados que molesten a sus propios clientes. Claro que es importante controlar el ruido. ¿Viene todo de los bares? No.

Basta de atizar por sistema a los empresarios hosteleros. “Cuatreros” les llegó a llamar un representante vecinal hace unos días en una Comisión. ¡Basta! ¿O no hay entre ellos mucha gente joven que arriesga su dinero y genera empleo? ¿Que no es el mejor del mundo? Trabajemos por diversificar el modelo productivo, trabajar la innovación y las vocaciones científicas desde edades tempranas, apostar por la economía azul que ya mueve 50 millones de euros al año en nuestra provincia… ¿Qué proponen a cambio los denostadores del empresariado y la hostelería? Nada, tratar de endeudar a la Administración más.

Es el momento de la responsabilidad. Crítica, toda. Faltaría más. Pero intentemos no dañar a nuestra ciudad con fines partidistas. Y menos proyectando una imagen irreal. De momento, el turismo que viene a Málaga es de buena calidad y hay que seguir apostando por buscar segmentos de alto poder adquisitivo (náutica, congresos, cultural…)

Artículo publicado por Juan Cassá en Viva Málaga, el martes 31 de julio de 2018