Gran parte del éxito en la transformación que ha experimentado Málaga en los últimos años viene de recuperar eso que llamamos asomarla al mar. Y no es un lugar común. Los muelles 1 y 2 del puerto son la prueba evidente de que el mar nos brinda toda una revolución urbana. Y sobre esto reflexionaba ayer en una tertulia de radio a la que fui invitada para analizar la necesidad de proteger nuestra Farola. Y es la Farola, esa icónica guardiana bicentenaria en pleno uso, la que nos recuerda la potencia de la relación de Málaga con el Mediterráneo.

No pretendo descubrir nada nuevo si digo que cada vez que Málaga ha mirado al mar le ha ido bien. Desde los tiempos en que aquellos emprendedores, imaginativos y pacíficos fenicios arribaron al delta del Guadalhorce pasando por ese siglo XIX de revolución industrial y burguesa.

Pero, ¿qué proyectos o propuestas básicas defiende Ciudadanos sobre este particular? Una de las más importantes es la de la remodelación de paseos marítimos de Palo y Pedregalejo. No se tocan desde 1984 y hay una gran oportunidad para mejorar esta zona de litoral Este, intentando mantener su esencia, la restauración tradicional, los chiringuitos… No me gustaría olvidarme de los Astilleros Nereo, que desarrollan una labor fundamental en la recuperación de nuestra historia. Es fascinante ver cómo están construyendo una réplica de barco fenicio con técnicas tradicionales (clavos de olivo, brea para calafatear o impermeabilizar el bote…)

Es preciso convertir los Baños del Carmen en un gran parque de 30.000 metros cuadrados (pagado a medias entre Gobierno central y Ayuntamiento); rehabilitar su histórico edificio del balneario, y ganar una gran playa con un ancho máximo de hasta 50 metros hacia El Morlaco.

Pero también lo es trabajar en el muelle 4, el Muelle Heredia del Puerto, donde cabría perfectamente un uso compartido comercial y de oficinas. Y, en paralelo, recuperar el concurso de la marina en San Andrés, cuyo concurso quedó desierto en plena crisis. A dos horas y media de Madrid.

Por el Oeste, hay que culminar el Paseo Marítimo de Poniente hacia Sacaba; acometer la pasarela peatonal sobre el río Guadalhorce (cerca de esa joya que desentrañaremos entre todos llamada Cerro del Villar), y defender el frente costero de Guadalmar de los temporales.

Artículo publicado por Noelia Losada, portavoz de Cs Málaga y concejala de Cultura, Deporte y Teatinos, el jueves 14 de noviembre de 2019 en Viva Málaga