Cerramos hoy una comisión importante, una comisión que se ha revelado como provechosa y muy necesaria, la primera comisión de investigación en este Ayuntamiento en muchos años.
Cierro, en mi doble condición de presidente de este órgano y como portavoz de Ciudadanos, satisfecho esta comisión.
Creo que no nos hemos casado con nadie, que nos hemos aproximado al problema de la pésima gestión de la limpieza en Málaga sin sectarismos
Creo que hemos sido ecuánimes y hemos atendido todas las las inquietudes. Tanto es así, y sirva como ejemplo, que a esta conclusión de cierre, sólo nosotros, PSOE y PP hemos presentado las conclusiones en plazo y aún así no ha habido ningún problema en atenderlas.
Ciudadanos trae hoy aquí 36 conclusiones para su debate y creo sinceramente que hay muchos puntos de diagnóstico que coinciden con otras fuerzas políticas. Creo que así quedará refrendado luego en la votación.
Es más, he podido leer en las conclusiones de otras dos fuerzas que el control público en Limasa ha fracasado y que, de facto, la empresa ha sido gestionada públicamente, aspectos con los que Ciudadanos estamos de acuerdo
Hemos celebrado 7 sesiones y hemos manejado decenas de páginas de documentación para llegar hasta aquí.
Hemos sido valientes. No hemos venido a la política a hacer amigos sino a tratar de solucionar problemas
Y esta comisión ha servido para poner cifras, analizar con opiniones fundamentadas y datos, muchos aspectos de la gestión de esta empresa.
Aquí ha comparecido el alcalde, el gerente de la empresa por dos veces, miembros del comité, los socios privados y funcionarios.
No ha sido una comisión sesgada. Nadie lo puede decir.
Tampoco ha sido una comisión que no le ha resultado nada cómoda al equipo de gobierno. Lo digo por quienes dudaban de la presidencia de Ciudadanos. Y a las pruebas me remito. Han intentado obstaculizarla cada vez que han podido con la ausencia inexcusable del mes de octubre
Ha sido una comisión en la que hemos forzado al alcalde a comparecer como máximo responsable político.
Una comisión en la que estuvieron los socios privados, con los que también hemos sido muy críticos.
Y una comisión en la que llevamos a la Fiscalía las declaraciones del presidente del comité de empresa, que habló de enchufes por parte de partidos políticos. No ha sido una derrota para nosotros el archivo de esta causa. Quizás si algún partido antes de 2011 hubiera acudido, otro gallo hubiera cantado
Pero, en general, es una comisión que se ha desarrollado por buenos derroteros y es algo que desde aquí agradezco.
Quiero entrar ya en materia, sin tampoco querer extenderme porque ha dado tiempo en estos meses para ir dibujando las opiniones de cada uno y las conclusiones están bien claras en la documentación que hoy debatimos.
Si hay algo que ha quedado patente durante esta comisión es que en Málaga hay que darle un giro absoluto a la gestión de la limpieza.
Limasa ha sido en la práctica una empresa en la que las grandes decisiones han sido políticas, han sido del alcalde
Limasa ha demostrado que con un control público no funciona. ¿Qué más pruebas necesitamos para privatizar el servicio?
Limasa es la mayor mancha en la gestión del alcalde en esta ciudad.
Limasa no puede ser pública.
Limasa debe ponerse integralmente en manos de terceros, de profesionales a los que podamos controlar, a los que podamos exigirles vía certificaciones.
Limasa debe prestar un servicio especializado en playas, polígonos, mercados…
Tiene que haber competencia.
Es un mito que una fórmula privada vaya a salir mucho más cara. A corto plazo, puede. A medio, lo dudo
Una de las personas que más saben de limpieza en el Ayuntamiento, como es el director del servicio, Julián Laguna, cifró la diferencia en sólo un 3%.
Ciudades como Zaragoza, con el servicio privado y más tamaño, arrojan balances 10 millones de euros más baratos que Málaga.
Lo más alejado de este modelo actual fracasado y caro, que cuesta 86 millones de euros a los malagueños cada año, es la fórmula privada y dividida
Si el alcalde quiere hacer Limasa pública, no hay problema. La aritmética le da seguro.
El alcalde tiene que decidir ya: vamos 6 meses tarde.
Acataremos, lógicamente, lo que ocurra porque para eso están los juegos de mayorías y este asunto de la limpieza no forma parte de ninguno de los acuerdos que tenemos con el equipo de gobierno.
El gran error en Limasa fue no haber rescindido el contrato en 2003 cuando se pudo hacerlo. Y, desde entonces, los problemas no han parado de crecer, con una empresa que tiene lo peor de lo privado y lo peor de lo público. Con unos privados sin riesgo en su ejercicio y con el beneficicio garantizado y una conflictividad laboral terrible
Desde los acuerdos de 2005 el alcalde de Málaga ha tomado las decisiones sobre las inversiones, la aprobación y ejecución de los convenios colectivos, así como sobre la calidad del servicio.
Hemos llegado a picos de deuda superiores a los 20 millones de euros
Hemos visto que los años electorales influyen en las cuentas de Limasa.
Que hay una falta total de renovación de la flota, con problemas para la seguridad de los trabajadores y en la prestación del servicio.
Hemos constado una falta evidente de la mecanización del trabajo y de modernización con sistemas tecnológicos. Hay una falta clamorosa de baldeos.
No existe un verdadero control del trabajo y de los resultados.
Se evidencia que falta una inversión aún de 17 millones de euros en la propia empresa que nunca llegarán a materializarse
Hemos visto que la compensación económica se ha convertido en un cajón de sastre al que cargar múltiples conceptos más allá de las subidas salariales. Y que esta cifra ha ascendido a 68 millones hasta 2014.
Hemos apreciado que la planta de tratamiento tiene un rendimiento muy mejorable. Por cierto, no tendríamos problemas en que ésta fuera pública puesto que puede generar ingresos para este Ayuntamiento.
Desde 2005 los socios privados han quedado sin poder ejecutivo en la empresa, su papel se ha reducido a meros asesores. Eso sí, con un 2% de beneficio anual sobre facturación garantizado. Es decir, si la justificación de beneficios de una empresa privada están en los riesgos asumidos, ¿por qué aquí se han establecido estas condiciones?
Ha quedado claro que es legal y frecuente, pero seguimos sin ver la pertinencia de un canon de asistencia técnica que ha sumado un desembolso de 24 millones de euros desde 2001.
Hemos visto subcontratarse servicios que tendrían que haber estado incluidos en ese canon.
Hemos constatado circunstancias a todas luces anómalas como privados facturando servicios extraordinarios para recuperar la normalidad en la ciudad tras una huelga y trabajadores cobrando horas extras y recuperando el dinero que habrían perdido durante las movilizaciones.
Se han reconocido aquí irregularidades en la gestión de la bolsa de trabajo, concatenación de contratos…
Las relaciones laborales en esta empresa están insólitamente politizadas.
Se han heredado 237 puestos de trabajo desde el año 2001
Hay un índice de absentismo disparado y malísima distribución de los medios humanos en el trabajo diario.
En definitiva, desde el punto de vista económico, técnico y humano la gestión de Limasa III ha resultado desastrosa y exige darle un giro completo
Por mi parte, antes de escuchar al resto de compañeros y de proceder a votar el dictamen, reiterarles mi agradecimiento a todos los participantes en esta comisión.
[Pinchar aquí para ver un resumen de la posición de Ciudadanos y Juan Cassá recogida en Onda Azul, PTV y Canal Sur]