Hace unos días acudí a la jornada de puertas abiertas celebrada en la Sociedad Protectora de Animales y Plantas. Siempre es una visita especial y conmovedora para alguien como yo que ama a las mascotas. No puedo entender que siga habiendo gente que abandone y maltrate y espero que en algún momento la ley sea lo suficiente disuasoria sin olvidar medidas educativas y de concienciación. La acción política es sustancial, y así Ciudadanos viene impulsando medidas tanto desde el Ayuntamiento de Málaga como desde el Congreso de los Diputados. Pero sin la colaboración de todos no será posible ese sueño que es lograr el sacrificio cero en Málaga, cuestión que fue objeto de un acuerdo firmado el año pasado con el alcalde.

Entre las cuestiones que hemos activado está el aumento de un 40% de la partida que recibe la Protectora. Toda ayuda es poca para la ingente labor que hacen, que, pese a ser voluntaria, rezuma profesionalidad, con Carmen Manzano, luchadora nata, a la cabeza. Este año recibirán 50.000 euros para fundamentalmente trabajar en la línea de la adopción, clave para conseguir los objetivos.

Protectora y Centro Zoosanitario Municipal son agentes complementarios que deben seguir caminando juntos. No cabe duda que para conseguir el sacrificio cero es primero preciso, aunque parezca obvio, poner a cero el nivel de abandonos. Y estamos muy lejos. Es muy triste que hasta enero la ‘Prote’ haya recogido 1.251 animales, de los que la mayoría son perros. Al menos, podemos celebrar que las adopciones nacionales e internacionales hayan superado ampliamente las 800.

No nos vamos a rendir. Vamos a seguir impulsando jornadas de debate y divulgación, eventos, medidas como la adopción gratuita en el Zoosanitario (con chip, ADN y esterilización), mejorando las zonas de paseo y las instalaciones, premiando los buenos comportamientos…

Uno de los indicadores de la modernidad de una ciudad es cómo trata a sus mascotas. Y, en este sentido, quiero que Málaga se convierta en un referente de lo ‘pet friendly’, de la tenencia responsable y que algún día podamos cantar victoria con el sacrificio cero. Se lo dedicaré a Rogelio y Malena, fieles amigos peludos que ya no están pero que siguen conmigo desde algún lugar al otro lado del arco iris.

Artículo de opinión publicado por Juan Cassá en Viva Málaga el martes, 16 de octubre de 2017