Ciudadanos ha comunicado esta mañana su decisión de romper el acuerdo de investidura con Francisco de la Torre tras la negativa de éste a destituir a los concejales Francisco Pomares y Teresa Porras y al gerente de Urbanismo, José Cardador, investigados por el Juzgado de Instrucción número 8 en relación a Villas del Arenal. Dicha investigación se produce después de que, durante la comisión que analizaba los miles de expedientes sancionadores caducados en Urbanismo, exaltos cargos denunciaran injerencias políticas en las tareas de disciplina. Cs, que presidió la comisión de investigación, fue el primer partido en poner estas graves acusaciones en conocimiento de la Fiscalía, que ha interpuesto una denuncia por posibles delitos de tráfico de influencias, prevaricación por omisión, falsedad en documento oficial y malversación de caudales públicos.

“A partir de ahora queda roto ese acuerdo, con todo lo que ello implica. Es una pena porque Ciudadanos ha dado sobradas muestras de espíritu constructivo. No en vano, hemos sacado adelante este mandato unos 25 acuerdos de índole presupuestaria y fiscal. El último acuerdo, lo promovimos en diciembre y en dos meses han sido incapaces de traer los presupuestos a pleno, habiendo acuerdo. La ruptura es única y exclusiva responsabilidad de Francisco de la Torre”, manifiesta el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Málaga, Juan Cassá, que recuerda que el plazo para destituir a los ediles y al gerente expiraba hoy a las 12 del mediodía.

“Como siempre, De la Torre trata de liar, enmarañar y de defenderse enredando. No puede haber ninguna discusión sobre que hay dos acuerdos firmados por el PP que atañen directamente a Málaga y que le obligaban a estas destituciones. La regeneración es una cuestión clave para Ciudadanos y se hacen firmar documentos con cada partido que quiera negociar investiduras con nosotros”, asevera.

Breve cronología

El Comité Nacional de Acuerdos Post Electorales aprobó en mayo de 2015 un documento que debía de ser firmado y asumido por todos los partidos que quisieran negociar gobiernos y alcaldías con Cs. El punto primero, ‘Compromiso por la regeneración democrática’ recogía textualmente: “Separar de inmediato de cualquier cargo, público o de partido, a imputados por corrupción política hasta la resolución completa del procedimiento judicial”.

Dicho documento fue remitido al alcalde Francisco de la Torre en los días posteriores a las elecciones. De hecho, el 27 de mayo de 2015 realizó unas declaraciones públicas en las que consideró “asumibles” los acuerdos planteados. Al día siguiente, 28 de mayo, fue más allá incluso y aseveró que no son sólo asumibles, sino muy asumibles desde el plano personal”.  Y volvió a ponerse en manos de la decisión de su partido.

El 4 de junio de 2015, el presidente del PP de Málaga, Elías Bendodo, firmó con Juan Cassá el citado documento en nombre de todo el PP provincial en un hotel cercano precisamente a la Gerencia de Urbanismo. Gracias a ese acuerdo y, como es lógico afectadas plenamente por él, se activaron automáticamente tres mesas de negociación (Diputación, Ayuntamiento de Málaga y otros consistorios de la provincia). El 4 de junio, bajo el paraguas del documento firmado por ambos partidos, empezaron las negociaciones con De la Torre para una posible investidura en Málaga capital.

Para mayor abundancia, un segundo acuerdo, esta vez en el marco de las negociaciones para constituir Gobierno en Andalucía, implica de lleno a los ayuntamientos andaluces. El punto 1, ‘Tolerancia cero con la corrupción’ recoge textualmente: “Ciudadanos y el Partido Popular se comprometen a la separación inmediata de los cargos públicos en todas las instituciones andaluzas, tanto autonómicas como locales, que hayan sido o sean imputados formalmente por delitos de corrupción, hasta la decisión definitiva del órgano judicial. Asimismo, ambos partidos se comprometen a que las personas que se encuentren en dicha situación no puedan ser incorporadas en las candidaturas electorales ni ser nombrados para desempeñar cargos públicos”.

“A la vista de ambos acuerdos, queda claro que De la Torre no sólo ha incumplido con Ciudadanos, sino también con el Partido Popular. No hay otra salida, lamentablemente, que romper el acuerdo de investidura”, concluye Cassá.