Una de las diferencias básicas de nuestra visión política es que los miembros de Ciudadanos venimos de trabajar en nuestras empresas, como funcionarios, como empleados por cuenta ajena… Sabemos muy bien lo que es mirar por cada euro de dinero público. Sabemos hacer mucho con poco. Y es hora de imponer en Málaga un nuevo modelo de gasto. En un cálculo somero, las malas decisiones del PP de Francisco de la Torre le han costado a los malagueños más de 200 millones de euros.

El alcalde gastó 21 millones en comprar en plena crisis, en 2010, el Astoria. Para que se hagan una idea, es casi la mitad del dinero que el Ayuntamiento tiene para invertir en un año. Otra cantidad abrumadora son los aproximadamente 160 millones pendientes de cobro en convenios urbanísticos. O los 7 millones de canon que perdimos por el fiasco del Museo de las Gemas, que fue objeto de una comisión de investigación durante este mandato.

Las expropiaciones no paran de depararnos quebraderos de cabeza con un flujo constante de sentencias contrarias. Tanto es así, que llegamos a preguntar por escrito cuál es el importe global al que hemos tenido que hacer frente por malos cálculos. No nos contestaron. Pero es frecuente leer en prensa sentencias que nos obligan a pagar varios millones. Como los 4 que nos costó tras la correspondiente reclamación judicial expropiar el edificio de la Casa Invisible, que iba a ser un centro de emprendimiento y ahora está okupado.

Podríamos seguir ‘sine die’ añadiendo despropósitos económicos. Con esta línea no es raro que cuando empezamos el mandato la deuda se situara en el 110%. Con los sucesivos acuerdos presupuestarios, Ciudadanos ha ido apretando. Ahora rondamos los 400 millones que, aun siendo mucho todavía, nos acercan a la zona verde de la ‘Ley Montoro’, lo que nos permite alguna ‘alegría’ más para inversión.

Bajar deuda es clave, al igual que seguir bajando impuestos. Este mandato hemos empezado a dibujar lo que queremos seguir haciendo. Se ha empezado a tocar la plusvalía por herencia, impuesto injusto y confiscatorio. Se han bonificado los casos más sangrantes (por unos 7 millones), pero hay que seguir dando pasos hasta su eliminación. Hemos obligado a importantes bonificaciones en ICIO, IBI, tasas de mercados, de apertura de negocios, a vehículos sostenibles… Y además impedimos un canon municipal del agua. Cs cuida el dinero público y baja impuestos.

Artículo publicado por Juan Cassá en Viva Málaga, el martes 7 de mayo de 2019