Les hablaba la semana pasada de fiscalización. Saben que Ciudadanos promueve dos comisiones de investigación y preside la de Limasa, que también se dirime, de nuestra mano, en la Fiscalía. Hemos sido duros en asuntos como los cargos de confianza, los posibles casos de falsos autónomos, los despilfarros de dinero en Astoria o Tabacalera… Todo eso, arraigado en el ADN de C’s, es compatible con algo también muy enraizado: el fuerte poder de transformación y construcción que le queremos imprimir a la política. Desde dentro. Sin derribar. Reformando.

 Suele presumir el alcalde de que Málaga fue la primera gran ciudad española con sus ordenanzas fiscales aprobadas, los impuestos municipales, por entendernos. Cierto. Fue con el apoyo de C’s, tras plasmarse cuatro puntos concretos del acuerdo de investidura encaminados a un ahorro de 10 millones para el bolsillo de los malagueños. De entre todas las medidas fiscales, estamos muy orgullosos de la subvención de la plusvalía en caso de herencia paterno-filial y primera residencia. En otras palabras: que quien tenga la desgracia de perder a sus padres no reciba encima el duro golpe económico de tener que pagar un dineral por seguir viviendo en su casa.

 Las ordenanzas son la primera fase, la que marca el capítulo de ingresos. Pero también apoyamos al equipo de gobierno para sacar adelante los presupuestos. Hubiera sido irresponsable tumbarlos y bloquear la ciudad. No gobernamos. Así que preferimos que parte de nuestro ideario se vea reflejado. Y así conseguimos 16 millones ‘naranjas’ en los presupuestos. La mitad está dedicada a un plan de emergencia social (que nadie nos dé lecciones). En la otra mitad, hay cuestiones como el inicio del Plan Especial del Monte Gibralfaro, el bono familiar de la EMT (que tiene el título anual más barato de España, 240 euros, gracias a C’s), la tarjeta turística Málaga Pass, tareas de reforestación o el inicio de los proyectos del colector que evitará el desastre que son cada vez que llueve nuestras playas.

No somos cómodos, pero sí responsables. No bloqueamos, sumamos. Y, sobre todo queremos lanzar un mensaje claro para contraponernos a urbes como Madrid, Barcelona o Valencia, con gobiernos radicales: Málaga es una ciudad para invertir

Artículo publicado por Juan Cassá, portavoz de C’s en el Ayuntamiento, en Viva Málaga el 17 de mayo de 2016