Las ONG y las fuerzas de seguridad tienen una preocupación creciente por la llegada de inmigrantes a nuestro país. Málaga no es una excepción y la tendencia es claramente al alza. Por un lado, se trata de un problema humanitario de primer orden. Por otro, está claro que nuestros efectivos policiales no siempre dan abasto para volcarse en traslados (muchos de los cuales son interprovinciales), identificaciones, custodias… Y, claro está, eso también supone una merma de efectivos en otras cuestiones y zonas de la ciudad cuando precisamente no corren buenos tiempos en cuanto a tasas de reposición y renovaciones de plantillas públicas.

Ciudadanos Málaga ha estado reunido con representantes policiales, encarnados en el sindicato Jupol, y en ONG de prestigio como Cruz Roja, y, además, ya hemos llevado iniciativas en relación a los menores no acompañados que llegan a nuestras costas. Esta semana, en el pleno ordinario del mes de octubre, lo que haremos será, vía moción, tratar de promover unas instalaciones fijas en condiciones dignas para atender a los inmigrantes. Dicho de otro modo, un CATE o centro de atención. Del mismo modo, pensamos que es importante aumentar la dotación policial en nuestra provincia y ciudad para atender estas necesidades sin merma en la seguridad ciudadana en general. Incluso, sería interesante activar un protocolo de colaboración entre policías Local y Nacional.

Y es que las cifras son preocupantes. Solamente en Málaga, han sido rescatados en torno a 4.500 inmigrantes en lo que llevamos de año, en más de 80 rescates. En cambio, en 2017 hubo 50 rescates en total. Los recursos está claro que son insuficientes y los efectivos y voluntarios se ven desbordados por esta situación.

Desde luego que gran parte de las políticas migratorias dependen de Europa y de sus estados miembros, pero es posible actuar desde lo cercano, en la medida de nuestras posibilidades. No habrá varitas mágicas ni soluciones milagro, pero, desde luego, se pueden garantizar mucho mejores condiciones para estas personas que desesperadas se echan al mar en busca de un futuro y también para quienes trabajan con ellas.

Artículo publicado por Juan Cassá en Viva Málaga, el martes 23 de octubre de 2018