La primera sesión de la comisión que investigará si el fiasco del Museo de las Gemas fue tan sólo el relato de una pésima gestión económica o si, por el contrario, hubo algo más, termina para Ciudadanos Málaga con muchas dudas y una certeza: hay que seguir indagando en un asunto que se oscurece por momentos. Este jueves se ha saldado con la única comparecencia de Fulgencio Alcaraz, cabeza visible de Royal Collections. Al fin y al cabo, habían sido unas últimas manifestaciones suyas las detonantes de esta comisión promovida por C’s, que, además, propuso a Eduardo Zorrilla, de IU-Málaga para la Gente, como presidente.
Arranca esta comisión con todo el crédito, en buena medida por el trabajo denodado de Ciudadanos en la de Limasa, presidida por Juan Cassá, que, al igual que la relativa al Museo de las Gemas, se dirime ya tanto en terreno político como judicial. En este caso, el representante de la formación naranja es el viceportavoz, Alejandro Carballo, quien, especialmente en la ronda final de preguntas, se ha mostrado incisivo. A preguntas de C’s, Alcaraz ha devuelto respuestas enjundiosas, como:
1) Que parte de lo facturado (más de 40.000 euros) por Miguel Ángel Cortés, exsecretario de Estado de Cultura y del ministerio de Exteriores con Aznar, se correspondía a “futuribles”, a cuestiones relativas al funcionamiento del fallido museo.
2) Que el Ayuntamiento usaba las obras para adecuar los edificios de Tabacalera que albergarían Art Natura para ir trasladando partidas para la globalidad del excomplejo fabril, calificado siempre por C’s como la “trituradora de dinero público”. “Tirabuzón de obras y más obras”, llega a aseverar el compareciente, quien admite no saber exactamente a cuánto ascendieron las obras en Tabacalera [los cálculos de Ciudadanos, sumando cánones y otros conceptos, ascienden a 58 millones de euros, de los que 31 estarían directamente vinculados a Art Natura]. Eso sí, dice que “más del doble de lo previsto”.
3) Que pudo haber pagos ajenos y se le hizo a Royal Collections “pasar por el aro” de cuestiones que no eran municipales. En concreto, la pregunta de Carballo fue inequívoca: “¿Se emplearon los 60.000 euros [partida anual destinada a promover asuntos educativos, talleres…] para cuestiones ajenas al contrato?”
4) Que hay un asunto cuanto menos extraño relativo a una factura de la Universidad de Valencia, sobre la que Alcaraz se ha remitido a una futura declaración en la Fiscalía el 17 de este mes.
5) Que los planos originales se alteraron por parte de Urbanismo sin conocimiento de la promotora. Incluso, ligado a esto y sobre los plazos, Alcaraz manifesta: “El Ayuntamiento y Ferrovial pactan una entrega fraudulenta de los edificio”.
Fulgencio Alcaraz se ha mostrado indignado en todo el desarrollo de la sesión, que ha adquirido un tono hosco y bronco cuando ha intervenido la concejala del PP Gemma del Corral. Tanto es así, que ambos actores han tenido que ser llamados al orden en sucesivas ocasiones por el presidente. El responsable de Art Natura ha guardado, no obstante, el equilibrio de las cuestiones que puede desentrañar en sede política y cuáles debe reservarse para los tribunales. “No quiero nulidades ni cosas así”, ha precisado.
Durante la sesión, también han salido a relucir acusaciones como que el PP habría ordenado buzonear toda Carretera de Cádiz con publicidad a través de una empresa que Alcaraz ha ligado con el Club Málaga Valley. De hecho, ha sido el supuesto dirigismo por parte del equipo de gobierno uno de los hilos conductores del discurso del promotor. “Haz esto, haz esto, haz lo otro… Nosotros aceptábamos porque no conocíamos Málaga”, ha incidido.
Dirigismo por parte del PP
Además del intervencionismo por parte del Ayuntamiento, desde Royal Collections se deja descansar toda la responsabilidad del asunto sobre los hombros del alcalde, Francisco de la Torre. Y, además, se han ratificado todas las acusaciones previas. “Se nos utilizó para sus campañas, para mantener la ilusión”, ha resaltado, al tiempo que ha llegado incluso a insinuar que el alcalde “tuvo prisa por aforarse” en 2008 y ha dejado de nuevo esa puerta entreabierta. En este sentido, Ciudadanos, ya avisó el pasado lunes, por boca de su portavoz Juan Cassá, que la formación fiscalizará pero medirá mucho sus palabras para desterrar a toda costa cualquier posibilidad de calumnia.
Por lo demás, las mismas sombras de dudas ha querido arrojar el compareciente sobre la financiación de campañas y cuestiones ajenas al museo que motivaron esta comisión que promete momentos más que interesantes, como el que han protagonizado los supuestos 10.500 euros destinados para 49 gemelos de plata y una decena de colgantes que se habrían destinado a personalidades y representantes políticos.
La facturación del propio exsecretario de Estado, de embajadores, nobles y empresas filiales y satélites será uno de los focos clave para Ciudadanos en próximas sesiones. Claves e hilos de los que tirar no faltan.